miércoles, 2 de diciembre de 2009

Los viajes gratuitos del View Master




No recuerdo cuándo fue pero sí como. La primera vez que ansiosamente acerqué mis ojos a ese aparto rojo me llevé tremenda sorpresa por lo que ví: una puerta que se abrió de repente dejandónme visitar mundos existentes solo en mis fantasías de niño.

A veces me doy cuenta de que invierto mucho tiempo pensando en mi pasado y poco en mi presente. Ahora, en el futuro...

El aparato rojo...muchos teníamos uno y funcionaba colocando los discos dentro de una abertura. De ahí en adelante todo lo que fuese imposible se hacía realidad. Era un caleidoscopio mágico, calma-mocosos-en-viajes-largos (o sea, yo), en citas de doctor, en fin...en toda ocasión.

Recuerdo que me fascinaba coleccionar los discos de destinos. ¿Quién dice que la realidad virtual vino con las computadoras? ¡Si el View Master era precisamente eso! Yo visité tantos lugares: Egipto, Mónaco, Sur América...Grecia, desde el momento en que pude trasladarme a la Acrópolis (en trecera dimensión era el disco, por cierto) decidí que algún día comería un poco de su tierra, en honor a la cultura que más admiro...y así lo hice, muchos años después.

Siempre quise que hicieran unos discos de View Master de Olivia Newton-John o de Sheena Easton, siempre desee tener unos de Mary Poppins. Me encantaba colarme en el mundo de Alicia en el País de las Maravillas a través de mi aparato. Mi trabajo ideal hubiese sido de Ejecutivo Diseñador de View Masters.

El domingo, ventaneando con parte de mi familia, mi hermana y yo quedamos extasiados al encontrar una nueva versión de View Masters en venta. Mi sobrino, extrañado ante tanta pompa, preguntó y le contamos sobre todos los buenos ratos que este aparato nos dio.

Para él probablemente no significa nada ver fotos en un aparato tal vez ahora irrelevante. Con tanta tecnología y tantos juegos de vídeo ha de pasar inadvertido. Pero para mí es un regresar a momentos muy felices y un jalón de orejas en dos sentidos: el primero, nada es obsoleto si se mantiene con persistencia -como el aparato, encontrado en la tienda- y segundo, todos los sueños que veía proyectados en los dos orificios del aparato aún pueden cumplirse...total, si el View Master discretamente ha sabido ser perseverante..¿Por qué no iba a serlo yo también?

1 comentario:

Eugenio García dijo...

Fantástico el viewmaster, siempre he pensado que no ha sido superado por nada en fotografía, ni siquiera por le nueva moda de la 3D.

Muchas gracias por pasar por Cosas de Jota y comentar. Es un aporte muy valioso.